York | |
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York es una histórica ciudad fortaleza del norte de Yorkshire, Inglaterra, condado del que es capital. En esta ciudad confluyen los ríos Ouse y Foss. La ciudad ha jugado un importante papel en sus 2000 años de historia.
La ciudad fue fundada como Eboracum en el año 71 d. C. por los romanos y la convirtieron en una de las dos capitales de la Britania romana. Durante ese periodo, grandes figuras estuvieron asociadas a esta ciudad, como Constantino el Grande. Todo el Imperio romano fue gobernado desde York por Septimio Severo durante un periodo de dos años.
Más tarde llegarían los anglos. La ciudad fue llamada Eoferwic y se convirtió en la capital del Reino de Northumbria. Los vikingos tomaron la ciudad en el 866, renombrándola Jórvic (de donde procede el actual nombre). Durante este periodo de dominio vikingo fue la capital del reino del mismo nombre, dominando mucho más que el norte de Inglaterra. Alrededor del año 1000 pasó a llamarse definitivamente York.
Warsaw | |
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Varsovia (en polaco: Warszawa, en Alfabeto Fonético Internacional: [varˈʂava] es la ciudad más grande de Polonia y la capital del país desde 1596. Es también la sede del presidente de la República, del Parlamento y del resto de las autoridades centrales. Cuenta con una población de 1 745 000 habitantes[2] (en 2014), lo que la convierte en la séptima ciudad más poblada de la Unión Europea, y que posee unos 3 101 000 habitantes en su área metropolitana.
La historia de la ciudad se remonta a finales del siglo XIII. En ese momento era un pequeño pueblo de pescadores. En 1569, el rey Segismundo III transfirió su corte junto con la capital polaca de Cracovia a Varsovia. Una vez descrito como el «París del Norte», Varsovia fue considerada una de las ciudades más hermosas del mundo hasta la Segunda Guerra Mundial.[3] Bombardeada al comienzo de la invasión alemana en 1939, la ciudad resistió. Las deportaciones de la población judía a los campos de concentración provocaron el Levantamiento del gueto de Varsovia en 1943 y la destrucción del gueto después de un mes de lucha. Una revuelta general en Varsovia entre agosto y octubre de 1944 llevó a una mayor devastación. Varsovia adquirió el nuevo título de «Ciudad Fénix» debido a su larga historia y reconstrucción completa después de la Segunda Guerra Mundial, que había dejado en ruinas más del 85 % de los edificios.